La Conferencia de las Partes de las Naciones Unidas Por el Clima (COP), que se llevará a cabo del 8 al 18 de noviembre en la ciudad egipcia Sharm el-Sheikh y reunirá a más de 200 países, se propone llegar a acuerdos multilaterales que permitan mejorar la lucha contra la crisis climática.
Aparte de basarse en los resultados obtenidos de la COP26 de Glasgow, se prevé que en esta edición los países más pobres y expuestos a la crisiclimática, principalmente el bloque africano, hagan fuerza para llegar a acuerdos basados en justicia climática. Se buscarán alianzas para que los países ricos, principales contaminantes, aporten fondos económicos para ayudar a los estados del sur a transformar sus economías y adaptarse a las nuevas condiciones climáticas que se presentan (sequías, inundaciones, monzones…).
En conclusión, la finalidad es que se renueve la solidaridad entre países para conseguir cumplir con el Acuerdo de París de 2015, en el que, entre los objetivos marcados, se establecía reducir sustancialmente las emisiones globales de gases de efecto invernadero por conseguir que el aumento global de la temperatura en este siglo fuera de entre 1,5 y 2 grados centígrados.